Los ejemplares de pelo largo son para personas con mucha dedicación

Los Angoras fueron criados por su lana, no como raza de piel. Sus profusas capas se esquilan regularmente como las de una oveja, y proporcionan una lana fina y muy suave para hilar -alrededor de un kilogramo anual por conejo. Tal capa es demasiado abundante para que un conejo cuide de sí mismo, y requiere un acicalado diario por parte del dueño para impedir que se formen marañas. Si no disfrutas con esta tarea diaria, ¡NO COMPRES UN ANGORA!

Encantadores, pero no tanto

Orejitas

 Los conejos miniatura, tales como los Enanos polacos y holandeses (derecha) son bonitos y encantadores. Tienden a ser más nerviosos e inquietos que sus parientes más grandes, y es más
probable que muerdan, por lo cual no son  recomendables como mascotas para los niños. Sin embargo, muchos individuos responden ante un manejo cariñoso, llegan a ser confiados, con caracteres poco díscolos, que proporcionan excelente diversión. Figuran entre las razas más longevas, con un promedio de 10 a 12 años de vida.

Hay conejos de muchos colores, tamaños, capas y temperamentos

Orejitas

 A partir de pequeños conejos marrones, el hombre ha desarrollado más de 50 razas en muchos colores y tamaños, variando desde gigantes mayores que un gato hasta miniaturas que caben en una mano. Los tipos de pelo incluyen a los Rexes, con cortas capas afelpadas, Satins, con capas suaves y muy brillantes, y otras de pelo largo como los esponjosos Cashmere Lops, y los Angoras de capas profusas -incluso el recientemente desarrollado Lionhead, con una capa corporal corta y una abundante melena alrededor del cuello.

Los conejos NO son juguetes.

Gris.

 Pueden dar ganas de abrazarles, pero tienen todos los instintos de sus antepasados salvajes. Los conejos salvajes son animales de presa, cazados por otras muchas especies. Se alarman fácilmente y están programados para responder a un susto huyendo, quedándose  inmóviles o dando una patada violenta, según las circunstancias. Viven a ras de tierra, y odian que les levanten por encima del nivel del suelo -algo que en la naturaleza sólo sucedería cuando un predador les capturase. Tu mascota tiene que aprender a confiar en ti antes de poder habituarse al entorno humano y disfrutar cuando le acaricien o abracen.

Los conejos domesticados tienen una larga historia.

Negri.

 La especie ha sido domesticada desde la época de los romanos, al menos. Sus antecesores salvajes son originarios de la cuenca del Mediterráneo, pero desde entonces el hombre los introdujo a través de Europa, en las islas Británicas, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y otros países. Durante siglos, los conejos domésticos han sido criados solamente por la carne y la piel. Originalmente se les alojó en grandes cercados llamados conejeras, pero a medida que las personas pasaron a vivir en las ciudades, comenzaron a tener conejos en jaulas para disponer de carne. La idea de cuidarlos como mascotas es reciente, a partir del siglo XIX.