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Gris. |
Pueden dar ganas de abrazarles, pero tienen todos los instintos de sus antepasados salvajes. Los conejos salvajes son animales de presa, cazados por otras muchas especies. Se alarman fácilmente y están programados para responder a un susto huyendo, quedándose inmóviles o dando una patada violenta, según las circunstancias. Viven a ras de tierra, y odian que les levanten por encima del nivel del suelo -algo que en la naturaleza sólo sucedería cuando un predador les capturase. Tu mascota tiene que aprender a confiar en ti antes de poder habituarse al entorno humano y disfrutar cuando le acaricien o abracen.
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